Cómo conseguir clientes para tu servicio de coaching

¿Querés conseguir tus primeros clientes de coaching o consultoría y no sabés cómo?

Conseguir los primeros clientes puede ser un desafío al principio: ¿y si no consigo suficientes clientes? ¿Y si no soy lo suficientemente bueno?

No te preocupes, para que tus dudas y miedos pasen a un segundo plano, queremos enseñarte algunas estrategias para conseguir tus primeros clientes de coaching.

Antes de comenzar hay cuatro cosas que tenés que tener preparadas antes de empezar a vender:

Un mensaje diferenciador. Tenés que saber presentarte, sabiendo indicarle al mundo el valor de lo que haces, qué te diferencia del resto de profesionales del rubro y por qué deberían elegirte a vos.

Un servicio atractivo para vender. Con las necesidades de tu cliente bien identificadas, tenés que diseñar un servicio que les ayude y les mejore la vida.

Aprender a hacer una sesión de ventas. Es importantísimo saber vender, qué y cómo ofrecer tus servicios a tus potenciales clientes para que quieran trabajar con vos y no se echen atrás.

Tener confianza en vos y en que podés ayudar a tu cliente. Si estás empezando, no tenés experiencia, y esto te hace sentirte inseguro para cobrar por tus servicios. Si este es tu caso, podes ganar confianza con este plan: conseguí un par de clientes gratis o a bajo precio pero que te ayuden a conseguir tus primeras referencias y a sentirte tranquilo que de verdad podés ayudar a la gente con el proceso.

Aclarado esto, estas son las estrategias que te van a ayudar, incluso desde el inicio si no tenés clientes.

5 estrategias para conseguir tus primeros clientes de coaching

 

1 – Informa a tu círculo de influencia

Comenzá a contarle a todo el mundo a qué te dedicás ahora: organiza reuniones con tus grupos de amigos, incluso con los que habías perdido el contacto, publica en todas tus redes sociales, etc.

El caso es conseguir que toda la gente de tu entorno personal y profesional (puede ser de tu antiguo trabajo) lo sepa porque podrán recomendarte incluso aunque no sean potenciales clientes ya que te conocen a nivel personal y quizás, profesional.

¿Parece una pavada? Quizás con un mensaje en Facebook que diga: “Hola ¿sabías que ahora me dedico a…?”. Esa publicación con una breve explicación, tal vez descubras cuanta gente no sabía de tu nueva profesión.
Te animo a que hagas la prueba.

2 – Amplía tu red de networking con otros profesionales del sector

Encontrarás dos tipos de profesionales con los que hacer networking que son interesantes en este punto:

Complementarios: son gente que puede tener en su entorno a potenciales clientes tuyos, por ejemplo con el director de un centro de yoga de tu ciudad dónde se hace un taller para sus alumnos de mindfulness puedes encontrar clientes.

Los “agenda completa”. Son personas que se dedican al desarrollo personal y que ya tienen la agenda llena. Puede ser un antiguo profesor o compañero de formación, pero si contactas con ellos y se tienen en consideración personal y profesional, seguramente te acaben derivando clientes que no pueden atender. Un flujo constante, basado en la confianza.

Hacé la prueba y localizá quiénes son en tu entorno, y si no encuentras, amplia tu red.

3- Ofrecé sesiones de valoración gratuitas

Una sesión de valoración no es una sesión gratis donde intentas solucionarle la vida a alguien. Lo que te propongo es hacer una “valoración”. Una reunión donde escuchás a tu cliente, analizás su caso, y le indicas si lo podés ayudar y cómo lo harías.

Es un momento donde ves si conectas y si merece la pena trabajar juntos. Por eso te proponemos que a cualquier potencial cliente que conozcas le hagas esa invitación, así, sin riesgo, podrá conocerte y conocer tu trabajo. Y vos seguís cobrando por tu trabajo.

4 – Hacé talleres sobre tu especialidad

Hacer actividades presenciales en asociaciones, centros cívicos, centros de terapia, centros de yoga, asociaciones formativas, eventos… O también online, con webinars que haces para los seguidores de otros profesionales del desarrollo personal.

Los talleres te pueden ayudar mucho a conseguir visibilidad y ser percibido como “experto”. Y si es presencial te ayudará a tener unas fotos para tu web que muestren que sos un profesional relevante y con autoridad.

No te olvides que ese taller “gratuito” o casi-gratuito tiene un objetivo y es conseguir tus primeros clientes. El precio es simbólico, porque es una inversión para vos, para darte a conocer, pero tenés que acordarte de ofrecer tus servicios, explicar bien el valor de lo que haces.

5 – Crea contenido “compartible”

¿A qué me refiero con esto? Esta estrategia consiste en crear algún contenido que esté relacionado con el problema de tu cliente y empezar a compartirlo por todos lados en tus redes, invirtiendo en publicidad en Facebook, grupos de Facebook para llegar al máximo de gente posible.

Simplemente, tenés que preparar una guía, video clase, sesión en directo, webinar, retos, congresos o el contenido que se te ocurra sobre herramientas y/o ejercicios para ayudar a tu cliente a resolver su problema y moverlo para que llegue al máximo de gente posible.

Recordá que si no tenés nada de experiencia podés hacer tus primeros clientes de forma gratuita con contactos, amigos, voluntarios que pidas en tus redes sociales y concursos. Esos sí, tené siempre presente esto: no más de 3 o 4 personas sin cobrar. Es solo para quedarte tranquilo de que podés hacerlo y conseguir tus primeros testimonios.

Fuente:
Artículo adaptado de A. Sastre